Simplicidad según Alain
Nuestro fundadorRevista
01 octubre 2024
El comienzo
Alain Coumont nació en una familia de cocineros. Sus abuelos tenían un restaurante, su padre era chef y su tía Simone era una talentosa pâtissier que horneaba tartas todos los sábados para que toda la familia las devorara el domingo. A los 6 años, Alain empezó a leer los dos libros de cocina que había en la estantería de su casa. Aprendió a cocinar leyendo recetas y consejos de cocineros famosos. Sus primeras creaciones fueron mousse de chocolate, bollos de crema y eclairs. No sabía que...
Capítulo 1
Simplicidad según Alain
mantenlo simple
En 1990, Alain Coumont abrió el primer Le Pain Quotidien en Bélgica, en la calle Antoine Dansaert. Lo que empezó como una humilde panadería se ha convertido en una marca mundial, pero el valor fundamental que Alain lleva en el corazón -y sigue llevando hoy- es la sencillez. Para Alain, la sencillez no es sólo minimalismo en el diseño o en los platos del menú; es una filosofía que guía todo lo que hacemos, desde la forma en que horneamos nuestro pan hasta cómo conectamos con nuestras comunidades.
A menudo le oímos decir: «¡Chicos, hagámoslo sencillo!». Este lema nos recuerda constantemente que la belleza de la vida reside en los momentos sencillos y honestos que compartimos, ya sea partiendo el pan en nuestra mesa común o disfrutando de una comida elaborada con los ingredientes más frescos.
Capítulo 2
Simplicidad según Alain
Creciendo de forma orgánica
El primer menú que escribió tenía 2 sugerencias para el desayuno, 8 tartines, 4 ensaladas y 3 postres. Eso es todo, ni más ni menos. Todo con ingredientes locales y de temporada. Algunos de estos platos todavía se pueden encontrar hoy en nuestra carta: el desayuno Le Pain Quotidien, la bombe de chocolate y la tartine boeuf basilic.
Alain abandonó Bélgica con su loca y en aquel momento revolucionaria idea de la masa madre orgánica y se marchó a Nueva York, donde abrió su primer restaurante Le Pain Quotidien en la Gran Manzana. Su sueño internacional se hizo realidad. Aunque fuimos abriendo más y más restaurantes, nunca olvidamos cuál era la idea inicial de Alain:
"Comida sencilla, sana y sostenible, para compartir con amigos o familia alrededor de nuestra mesa comunal o en casa alrededor de la mesa de tu cocina".
Capítulo 3
Simplicidad según Alain
Opciones visionarias
"Puede que la gente lo haya olvidado o que nunca lo haya sabido, pero Le Pain Quotidien marcó tendencia avant-la-lettre. Nunca se permitió fumar en nuestros restaurantes, mucho antes de que se convirtiera en la norma. El primer plato vegetariano llegó al menú en 1992, prohibimos todos los refrescos en 2005 y en 2011 presentamos nuestro primer plato vegano. Ahora, 35 años después, nuestro menú combina sabores, con respeto por el medio ambiente y la ingesta de nutrientes. Cobra vida en torno a principios fundamentales: respeto por las estaciones, bienestar animal, estrecha colaboración con proveedores locales & lucha contra el desperdicio alimentario."
- Alain Coumont
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Nuestras tartines
Una rebanada de pan... e innumerables variaciones.... Las rebanadas de nuestro pan artesano de 2 kg sirven de lienzo para una miríada de ingredientes de temporada. Se unen para formar nuestras tartinas, la versión belga del sándwich. Además del sándwich cerrado, la tartine es una versión abierta muy popular en Bélgica. Sencillas y elegantes a la vez, nuestras tartine aportan sabor a la mesa y deleitan el paladar. ¿Sabía que la palabra tartine procede etimológicamente del francés antiguo, diminutivo de tarte (tarta)? La palabra tartiner en francés significa literalmente «untar»; en nuestro caso: untar mantequilla, queso e ingredientes en una rebanada de pan de masa madre.
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ENCUENTROS ALREDEDOR DE NUESTRA MESA COMUNAL
Nuestra primera mesa comunal en la calle Dansaert de Bruselas se hizo con madera recuperada de los suelos de los trenes belgas que habían sido retirados del servicio. Aquellos sencillos tablones se convirtieron en una tradición. Hoy, esa misma madera tosca y recuperada sigue aportando confort rústico a nuestros restaurantes, y las mesas comunales se han convertido en nuestros centros de mesa. Creemos que la comunidad es lo que nutre, inspira y alimenta el alma. Nuestras mesas son lo bastante largas para que quepan todos y lo bastante estrechas para que todos puedan hablar; en ellas se reencuentran los amigos y se forjan nuevas amistades, relaciones y trayectorias profesionales en torno a la apreciación compartida de la deliciosa comida y la buena compañía. Para cada mesa nueva, la madera vieja se cepilla y lija hasta que queda completamente lisa, y la superficie sólo mejora después de años de que las manos de los invitados la toquen y los anfitriones la limpien.
Leer artículoPor favor tómese su tiempo.
Bienvenido a casaLe Pain Quotidien significa «el pan de cada día». Y para nosotros, eso lo significa todo. Es mucho más que un mero sustento; es una forma de vida.
Sencillo. Fresco. Honesto.
Nuestros platosNuestro menú se basa en ingredientes naturales y honestos, preparados frescos cada día. Y en el centro de todo está el pan que lo une todo.